· media hora de paseo ·
Concurso para la adecuación y mejora del parque municipal El Paseo de Tíjola
Tíjola se ha desarrollado históricamente en el encuentro de la cara norte de la Sierra de los Filabres con el valle alto del río Almanzora, dando lugar a un urbanismo vernáculo en ladera, donde la topografía condiciona el trazado del viario y de los espacios libres.
La propuesta pretende reconfigurar la gran plaza de El Paseo, concebida actualmente como una gran plataforma uniforme, romántica y contenida mediante muros y escaleras, para devolverle la estrecha relación con la topografía propia del urbanismo vernáculo. Tomando como base los recorridos habituales que se producen en la totalidad del ámbito, se pretende construir un nuevo paseo que recorra los elementos singulares existentes, tales como los árboles centenarios, así como la reinterpretación y adaptación de ciertos equipamientos necesarios y la recuperación de cartografías históricas de la población. El nuevo paseo construye una senda diagonal accesible, además de incluir la ermita en el ámbito del parque al peatonalizar la vía rodada existente entre ambos, poniéndola en valor. Este nuevo camino es susceptible de convertirse en ruta de paso preferente para vecinos, visitantes e incluso recorridos sacramentales como la procesión de San Sebastián.
La nueva morfología se organiza en torno a las arboledas existentes y a la travesía central de piedra, de la que surgen el resto de espacios, y que ofrece en sí misma un programa al viandante. De esta forma, el propio Paseo se convertiría en un lugar donde “hacer la media hora”, al ofrecer una serie de actividades y elementos singulares reinterpretados: arbolado representativo, zonas de reunión junto al agua, bancos que acompañan la topografía, un nuevo espacio escénico vinculado a una pieza mirador, un kiosko que permita tomar un aperitivo a mediodía o al atardecer y una explanada donde celebrar las diferentes fiestas y ferias del municipio. En estos lugares se reubican elementos preexistentes recuperados, tales como las esculturas de la antigua fuente y la columnata de la pérgola.
Al recuperar la pendiente original del enclave urbano se busca naturalizar la relación del paseo con su entorno y volverlo más permeable a las vías anexas evitando las discontinuidades generadas por los muros de contención actuales. Se potencian los valores intrínsecos del espacio en lugar de intentar transformarlos, reforzando el carácter verde de este espacio y su relación con el entorno periurbano: los cultivos hacia el río y la arboleda existente ladera arriba. Para ello, se conserva el máximo número de las especies arbóreas actuales, se añaden especies autóctonas y se sustituye gran parte de la pavimentación dañada por suelos permeables y sostenibles.
Se trata de un proyecto que gravita entre lo paisajístico y lo colectivo, lo vernáculo y lo contemporáneo, que pone en contacto la memoria local con la toponimia de sus espacios y cuyo tema principal es la recuperación de una topografía y la creación de una senda que la atraviesa, en el que confluyen delimitación, descanso, ecología, referencia, metáfora, contemplación o el agua de los campos. El Paseo ofrece una serie de espacios equipados que se combinan con circulaciones libres, facilitando la polivalencia y la flexibilidad del ámbito.
NUEVOS USOS PROPUESTOS PARA PASEAR (AL MENOS) MEDIA HORA
El nuevo paseo se dota de una serie de programas y espacios multifuncionales que dan sentido a la experiencia del visitante, al fomentar la estancia y la participación en actividades.
- Zonas de descanso y reunión en bancadas junto a los árboles preexistentes y junto a la lámina de agua.
- Parada de bicicletas, como punto de arranque de una visita periurbana o local.
- Espacio escénico polivalente: graderío que aprovecha la pendiente para representaciones, actuaciones o cine de verano.
- Kiosko: espacio reservado para desarrollar un establecimiento hostelero sencillo en el ámbito del paseo.
- Explanada: espacio libre de dimensiones análogas al existente en la actualidad, para celebración de ferias, fiestas u otro tipo de eventos. Cuenta con difusores verticales de agua.
MOVILIDAD SOSTENIBLE
La nueva configuración del espacio pretende reducir las barreras arquitectónicas, apostando por la accesibilidad universal, para lo que el nuevo eje del paseo se formaliza con una pendiente adecuada al recorrido de personas de movilidad reducida, enlazando la zona histórica del pueblo con la de expansión hacia el oeste.
La actuación busca facilitar las conexiones entre los márgenes este y oeste del municipio a través de la nueva senda, de acuerdo a las normativas vigentes. Esto permite que los lugares de conexión aumenten su funcionalidad y que las zonas de separación, como el borde de la plaza a la avenida, también cumplan mejor los objetivos previstos al crear un límite reforzado.
Se conecta el paseo con la ermita de Nuestra Señora del Socorro, peatonalizando el ámbito rodado que actualmente los separa: la ermita queda incluida dentro del espacio estancial del paseo, reforzando su papel como telón de fondo del mismo. Esto no genera problemas de tráfico ya que los flujos se derivan por las vías adyacentes
LA VIABILIDAD DE UN NUEVO PASEO
viabilidad técnica, económica, constructiva y funcional de la propuesta
El modelo de paseo que se propone basa su funcionamiento en la respuesta formal del municipio a las fuertes pendientes que lo condicionan: adaptación a la topografía, búsqueda de la línea de mínima pendiente longitudinal y trazado del recorrido más útil. Su viabilidad técnica se fundamenta en tanto se retorna al modelo originario de espacio público: aquel determinado por la propia ladera. De esta forma, no se trata de forzar la creación de elementos exógenos, sino de adaptarse a lo existente, buscando una solución que permita casar las diferencias entre rasantes perimetrales para mejorar la movilidad dentro del ámbito. No se niega la topografía, sino que se asume y se potencia como rasgo característico del municipio, combinándola con espacios singulares como miradores o zonas libres. En definitiva, se trata de trasladar un uso recurrente del espacio a la forma urbana, dotándola de coherencia.
Para evitar problemáticas derivadas del deterioro del pavimento a causa del uso frecuente del espacio, se recurre a adoquines de piedra de pequeño tamaño con gran resistencia a la compresión para los espacios principales, que se combinan con un pavimento continuo de árido calibrado de la zona en las zonas verdes y pavimento duro de alta permeabilidad para zonas estanciales. De esta manera, las zonas estanciales no se deforman con el paso del tiempo, y las zonas libres mantienen cierta permeabilidad del suelo y permiten el paso del agua al subsuelo. Los materiales y técnicas utilizadas son, en general, sencillos, de tal forma que su ejecución no suponga un aumento de la complejidad, ni se obligue a llevar a cabo sistemas estructurales complejos. Si bien el movimiento de tierras es la fase fundamental, esto se compensa al no existir requerimientos estructurales o de contención reseñables una vez alcanzadas las cotas de trabajo proyectadas.
La inversión económica se pondera entre las distintas áreas, ya que la morfología del proyecto permite centrar las energías en las zonas singulares de la actuación, pavimentando y delimitando los espacios previstos para desarrollo de programas, mientras que las zonas libres y arboladas requieren una inversión menor. Se distinguen los usos principales como el camino, la explanada, el graderío, o las zonas de bancos, frente a la liberación del espacio arbolado con pavimento continuo permeable, más económico. La reducción del número de muros de contención y su altura favorece así mismo la viabilidad económica de la obra, al ir de la mano de las pendientes naturales del espacio. Se pretende poner en carga la zona con una estrategia sencilla, que parte del lugar y que no trata de exportar soluciones impostadas.
EL METABOLISMO URBANO Y LA SOSTENIBILIDAD
sostenibilidad económica y ambiental, mantenimiento y eficiencia energética
La intervención en el Paseo de Tíjola, abriendo la plaza a su entorno, busca tener una reacción en la economía de la zona, al romper las discontinuidades existentes en la actualidad, permitiendo que los negocios, locales y viviendas de este ámbito tengan una nueva conexión visual, espacial y funcional. Se da lugar a un nodo urbano en el que se desarrollan actividades transversales entre los distintos programas –tanto los del espacio público, como los de gestión privada– y se aprovecha la buena accesibilidad peatonal y rodada a este lugar. Igualmente, la nueva organización recupera valores intrínsecos de la cultura local como la topografía, el concepto de la “media hora”, las zonas de reunión y los espacios mirador con objeto de mejorar la cohesión social del municipio: la apertura del paseo a su entorno en lugar de su situación elevada/deprimida del viario y la nueva senda diagonal fomentan una activación del espacio y su puesta en carga por la ciudadanía.
Ambientalmente, la actuación busca evolucionar de un espacio desconectado de su entorno, a uno caracterizado por la movilidad sostenible, de tal manera que sirva de entrada al centro histórico del municipio y sea parte de un nuevo sistema de vías peatonales o de prioridad peatonal. Se deja atrás la concepción del espacio problemático que hay que rodear para dar paso a una nueva vía verde que acorta los recorridos a pie además de contar con una oferta programática para “hacer la media hora”, es decir, que invite a sus usuarios a pasar tiempo en este lugar y a tomarlo como punto de encuentro ciudadano. Se utilizan materiales de la comarca, tales como el adoquín de mármol, el árido local y la vegetación autóctona, lo que reduce la huella de carbono de la intervención, los recursos hídricos necesarios, además de garantizar la durabilidad de los acabados y paramentos.
En cuanto al metabolismo urbano, se fomentará el mantenimiento de las especies arbóreas existentes siempre que sea posible, o el trasplante en su caso. A estas se añadirán nuevas especies autóctonas, que complementen la creación de espacios de sombra, el equilibrio térmico del paseo y la calidad del aire. Las especies arbóreas que se incluyen son encinas, cipreses y naranjos, con especies arbustivas como el esparto y la boja, lo que permite reducir el caudal de riego y fomentar la escorrentía de infiltración y superficial gracias a la permeabilidad del firme.
La actuación incluye dos sistemas de enfriamiento adiabático para mitigar las altas temperaturas del verano: una lámina de agua y una pequeña acequia, en la zona este del parque para crear un espacio estancial, y una serie de difusores verticales de agua en la zona de la explanada, que al activarse refrescan la zona de eventos. Además, los sistemas de recogida de agua permitirán su reutilización para riego y la captación de escorrentías o aguas superficiales. Se preverá la disposición de zonas de sombra en las épocas de rigor estival, que permitan mantener el confort climático en la medida de lo posible.
La sumatoria de los elementos descritos –arbolado, lámina de agua, entoldado estacional, pavimentos permeables, difusores húmedos– permite luchar activamente contra el efecto isla de calor en el espacio público, que dificulta la disipación nocturna por la acumulación de temperatura en los pavimentos. Se prestará especial atención a la ejecución de los nuevos firmes y de las cadenas de transmisión del agua en cada superficie, disponiendo las instalaciones necesarias para evitar bolsas o inundaciones indeseadas.
La iluminación se desarrolla mediante luminarias LED tipo báculo de bajo consumo, con enfoque descendente, y con recarga a través de paneles fotovoltaicos individuales, minimizando el consumo eléctrico y la contaminación lumínica nocturna.
La reducción de las áreas pavimentadas, y la elección de un adoquín resistente al uso a largo plazo, facilitan las condiciones de mantenimiento de la intervención. Los espacios libres y verdes quedan embebidos en pavimento continuo permeable, lo que evita la aparición de grietas. La permanencia y la durabilidad de los materiales están intrínsecamente unidas al entendimiento del sistema local presente, evitando imponer soluciones exógenas.